En los últimos meses se ha venido reportando un alto índice de contagio de sífilis, ya que por más que la gran mayoría de hombres están optando por estar en Prep, éste sólo protege de contagiarte de VIH, pero no de las its, entre ellas la sífilis, por ello es importante estar más familiarizado con ella que se está propagando silenciosamente.
Entre las enfermedades de transmisión sexual (ITS), se encuentra la sífilis, una infección bacteriana que que puede afectar tanto a hombres como mujeres. Se contagia a través del contacto directo y puede infectar la vagina, el ano, la uretra o el pene, así como también los labios y la boca. Es importante tratar esta enfermedad venérea y para ello será necesario saber cuáles son los síntomas de la sífilis.
Etapa primaria
La primera etapa de la sífilis se caracteriza por la aparición de una o diversas úlceras en el lugar en que la sífilis entró al organismo. Es común que estas llagas no generen dolor, por lo que pueden llegar a pasar desapercibidas, y pueden durar entre 3 y 6 semanas. Asimismo, en la primera etapa, otro de los síntomas de la sífilis pueden ser los ganglios inflamados.
Etapa secundaria
Las erupciones corporales son el principal síntoma de la etapa secundaria de la sífilis; estos brotes pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo: tronco, brazos, piernas, palmas de las manos, plantas de los pies, etc.
Asimismo, otras evidencias de esta enfermedad venérea pueden ser fiebre leve, fatiga, dolor de garganta, pérdida de pelo, pérdida de peso, inflamación de los ganglios, dolor de cabeza y dolores musculares.
Etapa terciaria
La última etapa de la sífilis no tratada corresponde a una fase latente, durante la que desaparecen los anteriores síntomas, pero la enfermedad sigue en el organismo de la persona infectada. Es común que no se presenten síntomas de la sífilis durante esta etapa terciaria, aunque esta etapa avanzada puede incluso presentarse entre 10 y 30 años después de haber comenzado la infección.
Cuando los síntomas sí se hacen evidentes, suponen problemas en la coordinación de movimiento, parálisis, entumecimiento, ceguera gradual y demencia. Asimismo, pueden producirse daños en los órganos internos y la sífilis puede llegar a causar la muerte.
Prevención y tratamiento
De la misma forma que con el resto de ITS o enfermedades venéreas, la prevención es el mejor método para evitar la sífilis.
Para las personas que padecen la sífilis, será fundamental que un médico les realice el diagnóstico apropiado para recibir el tratamiento adecuado.
La forma de tratar la sífilis durante las primeras fases es mediante una inyección de penilicina o de un sustitutivo (en el caso de que se sea alérgico a este antibiótico). En el caso de que el paciente se haya infectado hace más de 1 año es probable que se necesite más de 1 inyección para poder eliminar del todo esta afección. Lo que es importante que sepas es que durante el tratamiento no puedes tener relaciones sexuales pues aún estás infectado y podrías contagiar a alguien.
No dejes pasar más tiempo y si estuviste en alto riesgo, visita a un médico para que te brinde una orden y te hagas un análisis de sangre el cual determinará si te infectaste o no.