Investigadores de la Central Queensland University en Australia han realizado un estudio durante nada más y nada menos que 10 años para confirmar algo que ya sabíamos: de media, una persona en una pareja estable engorda 5,8 kilos más que una persona soltera.
“Cuando las parejas no necesitan estar atractivas y delgadas para atraer a una pareja, se sienten más cómodos comiendo azúcares y grasas”.
Cuando estás en pareja solo cuelgas selfies con tu novio y cuando estás soltero solo cuelgas fotos en el espejo del gimnasio. Nada que nos vaya a sorprender. Pero ojo, que no solo hablan de relaciones estables, cuando las parejas tienen hijos, aún engordan más porque se comen las sobras de lo que no se comen sus hijos. Así que la cosa ya no solo va de estar guapo o no, sino de tener otras prioridades en la vida.
Lo importante es ser feliz, estar lo más sano posible (que no quiere decir delgado) y vivir con paz y armonía.