Si pensabas que la gonorrea era una de esas enfermedades de transmisión sexual que habían quedado en el pasado y de la que no tenías que preocuparte, lamentamos decirte que te tenemos malas noticias: en los últimos años, la gonorrea se ha convertido en una de las ETS más contagiosas alrededor del mundo, y lo peor: es cada vez más resistente a los antibióticos, lo cual la hace más difícil de tratar.
En su informe anual de unos años atrás, la Organización Mundial de la Salud informó que la enfermedad afecta al menos 78 millones de personas en el mundo, de los cuales 11 viven en todo el continente americano. Según explica el organismo, el número de infecciones está actualmente en aumento, y todo es por culpa de las conductas sexuales inseguras, en especial entre personas entre los 18 y los 29 años de edad.
Sí, así como lo lees: la disminución del uso del preservativo, el aumento del turismo sexual, y sistemas de detección poco efectivos son las principales causas de que la gonorrea (¡la gonorrea!) esté en alza. Si a esto le agregamos que en países de menores recursos se aplican tratamientos inadecuados e insuficientes, que no acaban con el foco de la enfermedad, sino que la mantienen latente y causan mutaciones genéticas que la refuerzan ante los antibióticos… las cosas están mal.
Los síntomas y cómo detactarlos
Lo peor de todo es que la mitad de los pacientes con gonorrea no presentan ningún síntoma, así que su detección llega demasiado tarde. ¡Por favor, usa preservativos! Si te niegas a hacerlo, lo responsable es hacerte exámenes de ETS de manera regular (estamos hablando de cada dos semanas), así tengas síntomas o no, pues mucha gente se entera de que tiene la enfermedad semanas después de tener el primer contacto, cuando ya es demasiado tarde.
Como queremos ayudarte, vamos a darte algunos de los síntomas más comunes de la gonorrea, así que presta atención.
Si tienes vagina, puede haber cambios en el flujo vaginal: puede volverse más acuoso, o tomar un tono amarillos o verdes. También es probable que sientas dolor al orinar, y en el abdomen, y experimentes sangrado entre períodos. La menstruación también puede volverse más intensa, aunque uses pastillas anticonceptivas hormonales.
Si tienes pene, puedes tener líquido inusual saliendo de la punta de el pene, color blanco amarillo o verde. También vas a sentir dolor al orinar, y sensibilidad en los testículos. La gonorrea también podría manifestarse en el ano con dolor y secreciones, pero también en la zona ocular, con dolor, hinchazón, irritación, y secreciones. Ah, y no olvidemos la boca y la garganta, que pueden llenarse de llagas.
Suena terrible, ¿no? Pues si los síntomas te suenan familiares ve al médico. Usualmente te toman una muestra de orina y te hacen un análisis luego de usar un hisopo en tu vagina o alrededor de la entrada de tu uretra. Si tienes gonorrea, te tocará una ronda de antibióticos, y las cosas allá abajo deberían calmarse luego de algunos días. Igualmente, recomendamos volver a chequearte un par de semanas después y recordar algo importante que muchos olvidan: siempre puedes volver a contraerla.