Llegó la hora de que luzcas un hermoso trasero con estos ejercicios y los presumas con mucho orgullo.
¡Quítate esa flojera!
Varias encuestas han demostrado que el gluteus maximus, como vulgarmente le llamamos a los glúteos (¡ay, ajá!), es una de las partes que más roban miradas. ¿Quién no ha aprovechado para darse una buena vista con un trasero bien formadito cuando va por la calle?
Lo que piensan las personas de un trasero —por ejemplo: “se ve más sexy su caminado”, “es que parecen tablas” o “están bien para agarrarlos a la hora de la hora”— es uno de los principales objetivos por los que los hombres y mujeres ejercitan esta parte de su cuerpo.
Por eso, y para que no te estén criticando, a continuación te damos algunos ejercicios básicos que te ayudarán a tonificar y presumir esos maravillosos glúteos.
Zancadas
También conocido como longe, este ejercicio está destinado al trabajo de las piernas y los glúteos.
El músculo del trasero que trabaja más durante el movimiento es el glúteo mayor. De hecho, la estimulación de los tres músculos del glúteo es mayor comparado con otros ejercicios.
El muslo —o cuádriceps— es el músculo de la pierna que más se ve beneficiado, y si la zancada es amplia, también trabajan los músculos isquiotibiales —conocidos como femorales—.
La suma del trabajo de todos estos músculos representa un esfuerzo importante a nivel cardiorrespiratorio, por lo tanto, es ideal para ponerse en forma.
Sentadillas
También conocidas como squats, las sentadillas son uno de los ejercicios más completos, pues trabajas prácticamente todo el cuerpo —puedes añadir peso, por ejemplo: una barra sobre los hombros—, centrándose en los cuádriceps, glúteos e isquiotibiales.
Dependiendo de la apertura de las piernas respecto al ancho de los hombros se trabajarán varios músculos: cuádriceps, abductores, aductores y los glúteos.
Es común cometer errores durante la realización de este ejercicio, por ejemplo: curvar la espalda, juntar las rodillas en el centro o flexionarlas hacia afuera, y esto puede afectar algunas partes del cuerpo.
Desplantes laterales
Los desplantes laterales son ejercicios de resistencia que permiten trabajar varios músculos al mismo tiempo: cuádriceps, los glúteos y el bíceps femoral. Además, puede ser complementario de las sentadillas.
Este tipo de ejercicios tiene beneficios cardiovasculares y son una buena opción para incrementar los niveles de energía durante el día, pues te ayudan a quemar grasa de una manera notable si lo realizas de manera óptima.
Por si fuera poco, los desplantes ayudan a mejorar la postura y tonifica el abdomen.
Elevación de pelvis
La elevación de pelvis, también llamada “puente”, es un excelente ejercicio para trabajar los glúteos —en especial, los glúteos mayores— y los isquiotibiales.
Es un ejercicio idóneo para glúteos porque con series largas y, bien realizado, el ejercicio permite sentir la contracción de cada músculo trabajado, sobre todo al final de la elevación de la pelvis.
Además, para la elevación de la pelvis se requiere del esfuerzo de los abdominales, por lo que estos también se ven beneficiados.
Peso muerto
Para la realización del peso muerto trabajan todos los músculos situados en la parte posterior de las piernas, ya que al enderezar el torso cargando peso se trabaja el glúteo mayor y los isquiotibiales.
Ya que en el peso muerto se produce un estiramiento de la zona posterior de las piernas, este ejercicio favorece la movilidad.
Si decides separar más las piernas y realizar peso muerto, trabajarás aductores y cuádriceps también.
Yo tengo un trasero bien formado que estoy seguro más de uno me lo quisiera acariciar