El 25 de marzo fueron presentadas a la Corte Electoral de Uruguay 69.360 firmas para iniciar el primer paso de derogación de la Ley Integral para Personas Trans.
La firmas recolectadas en todo el país por el precandidato del Partido Nacional, Carlos Iafigliola, y el diputado del mismo partido, Álvaro Dastugue, superó el 2% del padrón electoral necesario para iniciar el referéndum.
Una vez que la Corte Electoral valide las firmas deberá convocar a un prereferéndum que debe contar con el apoyo de un 25% del padrón electoral, es decir unos 650 mil votos.
Si logra esa cantidad, la Corte Electoral debe convocar a un referéndum obligatorio donde se definirá si se deroga o no la llamada “Ley Trans”.
Luego de entregar las firmas, Carlos Iafigliola aseguró que “la gente firmó porque entendió que la ley estaba violentando el artículo 8 de la Constitución de la República que dice que todos somos iguales ante la ley. A las personas comprendidas se les va a estar dando beneficios por encima del resto de los ciudadanos”.
En entrevista con el programa “Esta Boca es Mía” el precandidato aseguró que “el tema más grave es que esta ley está atravesada por la ideología de género, niega la biología, niega que nacemos varón y mujer y la ley dice que se nos asigna convencionalmente un sexo al nacer”.
“A mí me preocupa que el Estado se meta dentro de tu casa” y “le diga a los padres vos quédate acá de costado que yo me encargo de tu hijo. Para mí eso es muy grave está violentando claramente la patria potestad”, señaló.
Iafigliola aseguró que “no tenemos nada contra las personas trans, contra nadie, respetamos la dignidad humana de todas las personas desde el vientre materno mismo”, pero la ley trans “es una ley mala, injusta, peligrosa e inconstitucional”, advirtió.
La Ley Trans presentada en junio de 2017 por el Frente Amplio afirma que busca promover la equidad de género erradicando toda forma de discriminación de la población transgénero.
El documento aprobado por el Senado el 19 de octubre de 2018 establece que una persona mayor de edad puede cambiar de nombre y sexo en el Registro de Estado Civil con la sola voluntad. Esta podrá ser revertida hasta pasado cinco años y a los datos originales.
También establece el acceso a intervenciones quirúrgicas y tratamientos hormonales “para adecuar su cuerpo, incluida su genitalidad, de acuerdo a su identidad de género autopercibida, sin necesidad de requerir autorización judicial o administrativa”, describe la ley.
Los menores de 18 años podrán realizar el cambio de nombre y sexo registral, intervenciones quirúrgicas y tratamientos hormonales acompañados de sus padres o representante legal.
De no contar con el consentimiento de sus tutores, el menor puede solicitar representación del Estado.
Asimismo, la Ley Trans establece una reparación económica vitalicia para aquellas personas que afirmen haber sido víctimas de violencia y nacidas antes del 31 de diciembre de 1975.
También establece a la población trans el 1% de las vacantes laborales en la administración pública, el 1% de los programas de capacitación impartidos por el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional y la prioridad en el acceso a la vivienda.